La Pieza que Falta en el Rompecabezas del Hipotiroidismo
¿Tu médico te ha dicho que tus niveles están “ajustados” pero sigues sintiéndote agotado, perdiendo cabello o con problemas para controlar tu peso?
Hola, soy Tanja Fellenberg y hace 8 años me diagnosticaron hipotiroidismo.
Me sentía cansada y sin energía constantemente, tenía problemas digestivos y ganaba peso sin razón aparente.
A pesar de llevar una dieta saludable, parecía casi imposible perder ni siquiera un kilo.
A pesar de seguir una dieta saludable, parecía casi imposible perder ni siquiera un kilo, aunque comía menos de lo que se supone que mi cuerpo necesita según varios cálculos de calorías.
Y esto a pesar de que comía menos calorías de las que, en teoría, mi cuerpo necesitaba para mantener el peso.
Pero lo peor de todo era la fatiga constante. Casi todas las tardes me quedaba completamente agotada.
Los medicamentos que me recetó el médico ayudaron al principio.
Lo que no sabía entonces era que una tiroides inactiva, aunque suene inofensiva, puede causar muchos problemas en el cuerpo.
La tiroides es como el centro de control de la producción de energía y la regulación hormonal.
Cuando no funciona bien, pueden aparecer otros problemas como un hígado debilitado y una digestión que deja de funcionar bien.
Los problemas se acumulan y es fácil caer en una espiral negativa.
Mirando atrás y con lo que sé hoy, todos mis síntomas tienen sentido.
En los últimos dos años, he logrado controlar casi todosy he conseguido darle la vuelta a esa espiral descendente.
Mis niveles de tiroides han vuelto a la normalidad, y he podido reducir la dosis de tiroxina de 125 microgramos a solo 25 microgramos.
Después de vivir esto en carne propia y ver lo poco cuidadoso que puede ser el tratamiento del hipotiroidismo en muchos casos (la mayoría de los médicos simplemente prescribe un medicamento como L-tiroxina y aumenta la dosis de mes a mes), he decidido compartir mi historia para ayudarte y ofrecerte una perspectiva diferente.
En este blog aprenderás:
- el papel de la glándula tiroides y su relación con el hígado.
- por qué puedes seguir teniendo síntomas, aunque estés tomando tiroxina (T4) y tus análisis salgan bien.
- por qué el zinc y el selenio no suelen ser suficientes.
- la pieza del rompecabezas que más suele pasarse por alto en los problemas de tiroides
Mi transformación
Volviendo a mi historia personal
Cuando ya no podía más con el cansancio constante, decidí ir al médico y hacerme un análisis de sangre.
Mi médico notó que mi nivel de TSH estaba alto.
Por supuesto, yo no entendía su importancia en ese momento.
Pero mi médico sí.
Me dijo: “Cuanto más alto es el nivel de TSH, menos hormonas tiroideas hay en el cuerpo, y mayor es la probabilidad de que haya hipotiroidismo (o una glándula tiroides lenta).”
En mi caso, el valor era 5.
El rango normal está entre 1 a 2.5.
Cuando me diagnosticaron hipotiroidismo, al principio sentí alivio.
Ya no estaba completamente a ciegas.
Por fin tenía una explicación para mi malestar.
Mi médico me dio esperanza de que podríamos solucionarlo.
Después de todo, no soy un caso raro.
Si ajustas bien la medicación, todo debería volver a la normalidad y mis síntomas desaparecerían.
Y aquí es donde entra el tema del ajuste correcto de la medicación.
Si tú también sufres de hipotiroidismo, esto te sonará familiar:
El médico te receta L-tiroxina, el tratamiento de siempre para los problemas de tiroides.
A mí me recetaron primero 25 microgramos de L-tiroxina.
La L-tiroxina, una hormona tiroidea sintética, es el medicamento más recetado en los Países Bajos después de los analgésicos.
“Ahora que estás bien ajustada, tu tiroides debería volver a funcionar bien y producir suficientes hormonas”, me dijo el médico.
Llena de esperanza, fui a la farmacia, recogí la medicación para la tiroides y empecé a tomarla durante un tiempo.
Pero, sorprendentemente, no noté ningún cambio, aparte de añadir esas pastillas a mis mañanas.
Un mes después, el médico aumentó la dosis de 25 a 50 microgramos.
En la siguiente consulta, me dijo: “Hola, Sra. Fellenberg, tus análisis de sangre han mejorado mucho.”
Sí, mis valores en sangre estaban bien.
Pero, ¿de qué me servía tener unos valores perfectos en la sangre si me sentía peor que nunca?
Así que mi calvario continuó hasta llegar a una dosis total de 125 microgramos de L-tiroxina.
Mis valores en sangre no solo no mejoraron, sino que empeoraron, y mis síntomas también fueron a peor.
Los análisis de sangre salían bien, pero me sentía más débil que nunca.
Con esto en mente, comencé a buscar una solución.
Es muy frustrante que el médico te diga una y otra vez que los valores son normales y que no se puede hacer mucho más.
Además, sabía que tomar hormonas tiroideas sintéticas puede afectar al hígado a largo plazo.
Así que decidí tomar el asunto en mis propias manos.
Fue en Navidad de 2022 cuando di con algo que cambió todo.
Mi mejor amiga me regaló un libro en Navidad.
Ella sabía que tenía problemas con mi tiroides.
El libro trataba sobre la salud tiroidea y la enfermedad de Hashimoto.
Aunque suelo ser escéptica con este tipo de libros, decidí darle una oportunidad.
El autor también tenía problemas de tiroides y describía síntomas que me eran demasiado familiares.
Desde la obesidad hasta problemas metabólicos y falta de motivación, todo estaba allí.
Al igual que a mí, tampoco le tomaron en serio en un principio, y tuvo que tomar las riendas de su salud.
Y qué milagro, de lo contrario, no habría escrito un libro:
Manejaba todos los síntomas muy bien.
Curiosa, comencé a leer...
Un descubrimiento que cambió mi vida para siempre.
El autor logró explicar de con humor lo que le sucede a la glándula tiroides.
En el libro leí que un valor elevado de TSH significa que no se pueden producir hormonas tiroideas.
La abreviatura "TSH" me sonaba muy familiar por mis análisis de sangre.
La TSH regula la actividad tiroidea.
La glándula pituitaria envía una señal a la glándula:
“Querida tiroides, por favor, produce hormonas, necesitamos energía.”
Energía para muchas cosas importantes, como:
– Generar calor cuando tienes frío
– Tener energía para despertarte
– Mantener el ciclo regulado
– Ayudar a que el sistema digestivo funcione bien
– Estimular el crecimiento del cabello
– etc.
Sin embargo, algo no iba bien en mi cuerpo…
Mi médico me confirmó que mis valores en sangre habían vuelto a la normalidad, y que mi nivel de TSH estaba otra vez estable.
Pero mi estado de ánimo empeoraba día tras día.
Empecé a preguntarme qué tenía que hacer para que, además de mejorar los valores en sangre, se notaran los cambios en mis síntomas.
Leí en el libro que, lamentablemente, no es suficiente hacer que la glándula tiroides produzca más hormonas:
Las hormonas tiroideas deben convertirse en una forma activa y, después, .
Para que este proceso funcione, necesitas un organismo fuerte:
Solo cuando estos pasos funcionan en armonía, las células producen la energía que necesitamos.
Entonces, estaremos rebosantes de energía, ya no nos sentiremos cansados ni tendremos los pies fríos.
Cuando tu metabolismo se reactive y desaparezca la sensación de pesadez, te sorprenderá cómo puede influir incluso en tu peso.
No te lo vas a creer.
Voy a explicarte cómo puedes hacer que la glándula tiroides funcione bien otra vez, para que tu energía (y tu vida) vuelvan a la normalidad.
Paso 1: Producir hormonas tiroideas otra vez
Cuando la glándula pituitaria libera la hormona TSH, todo se pone en marcha.
Algo interesante sucede dentro de las pequeñas células de la glándula tiroides.
Ahí se produce principalmente la hormona tiroidea tiroxina (T4).
La T4 es conocida como la hormona tiroidea lenta y está compuesta por el aminoácido tirosina y cuatro átomos de yodo.
La mayoría de los médicos tienden a fijarse solo en esto.
Si detectan un nivel alto de TSH (y quizás un nivel bajo de T4, si es que lo revisan), suelen recetar directamente L-tiroxina o T4.
Así, tratan de aliviar los síntomas con medicamentos.
Sin embargo, en muchos casos esto no basta.
Paso 2: Activación de las hormonas tiroideas (T4 –> T3)
Por sí sola, la tiroxina (T4) no hace gran cosa en el organismo.
En principio, es solo una forma previa de la hormona activa.
Lo importante ocurre cuando la T4 se transforma en triyodotironina (T3), la hormona activa que impulsa procesos vitales en el cuerpo.
¿Cómo?
Dividiendo un átomo de yodo de T4 con la ayuda de enzimas.
Esta activación se lleva a cabo en gran medida en el hígado y se llama 5′-deiodinasa.
Las enzimas 5′-deiodinasa son responsables de convertir la hormona tiroidea tiroxina (T4) en su forma activa triyodotironina (T3).
Paso 3: Transporte de T3 a las células
Una vez activadas, las hormonas tiroideas (T3) deben llegar a las células para liberar energía.
Pero, ¿cómo llegan a su destino?
Esto se logra con la ayuda de las llamadas proteínas transportadoras.
Las proteínas transportadoras necesitan los nutrientes adecuados para este transporte en la sangre y en la célula.
Cuando las hormonas tiroideas llegan a su destino, ¡empiezan a producir energía!
De vuelta a mi análisis de sangre
Mis niveles de TSH habían vuelto a la normalidad, y el nivel de T4 también estaba dentro de los valores adecuados, todo gracias a la L-tiroxina.
Para mi médico, parecía que todo estaba en orden.
Mi cuerpo tenía suficiente T4.
Pero yo seguía sintiéndome mal.
Eso significaba que mis síntomas debían tener otra causa:
- o bien la T4 no estaba convirtiéndose correctamente en la T3 activa,
- o bien el T3 no lograba entrar en mis células.
Solo había dos opciones.
De todos modos, no podía haber sido porque mi nivel de T4 era demasiado bajo.
¿Por qué suele fallar la conversión de T4 a T3?
Es importante recordar que la activación de T3 ocurre principalmente en el hígado.
Y hay un indicador que muestra si la activación de T3 (5′-deiodinasa) funciona bien:
El nivel de glutatión.
La experta en tiroides, la Dra. Dorothea Leinung, escribe en uno de sus artículos especializados:
"Cuando nuestra tiroides produce hormonas tiroideas, también produce radicales libres. Si no hay suficiente glutatión para controlar este estrés oxidativo, el exceso puede dañar otros tejidos."
Ya en un estudio de 1988 se documentó la relación entre el glutatión y la activación de T3 (5′-deiodinasa).
El glutatión es el antioxidante más común y poderoso del cuerpo.
Por eso a veces se le considera el antioxidante más importante.
Y ten en cuenta:
Está compuesto por tres aminoácidos: cisteína, glicina y ácido glutámico.
Otro estudio sugiere que el aminoácido L-metionina juega un papel clave en el hígado contra el estrés oxidativo.
La metionina, además, es una precursora de la cisteína, uno de los tres aminoácidos que forman el glutatión.
Para resumir el problema:
Tomar el medicamento tiroideo L-tiroxina (T4) no ayudará mucho porque sigue en forma inactiva.
La hormona tiroidea T4 debe convertirse en la forma activa T3. Este proceso tiene lugar en el hígado.
La T3 activa puede ahora liberar energía en tus células a través de proteínas transportadoras.
Cuando estos procesos metabólicos funcionan bien, los síntomas del hipotiroidismo, como la fatiga, tienden a desaparecer y la tiroides vuelve a funcionar de forma óptima.
Los aminoácidos juegan un papel particularmente importante en la conversión de T4 a T3.
Al fin descubro la pieza que faltaba en el rompecabezas.
Después de leer estos estudios con atención, investigué más a fondo para comprender mejor la conexión entre los aminoácidos y la salud tiroidea.
Los paralelismos entre los problemas tiroideos y la deficiencia de aminoácidos se hicieron más claros a medida que investigaba más.
Esto me llevó a preguntarme si también podía tener una deficiencia de aminoácidos.
La mayoría de las personas, incluyéndome a mí durante mucho tiempo, creemos que con una dieta normal obtenemos suficientes proteínas y, por tanto, todos los aminoácidos esenciales.
¡Sin embargo, esto no siempre es cierto!
Las mujeres, en particular, no consumen suficiente proteína animal, que es esencial para la conversión de T4 a T3 y el transporte de hormonas tiroideas a nuestras células.
Es aún peor para los veganos y vegetarianos.
Las fuentes de proteínas varían mucho en su calidad.
Una forma de medir lo bien que una proteína proporciona todos los aminoácidos esenciales es a través del valor DIAAS (Digestible Indispensable Amino Acid Score).
La proteína animal tiene un valor biológico mucho mayor que la proteína vegetal.
De hecho, ahora creo que la mayoría de las personas con hipotiroidismo tienen deficiencia de aminoácidos.
Esto se debe a 2 cosas:
Razón n.º 1: nuestro requerimiento de proteínas es mucho más alto
Las personas con problemas de tiroides tienen un requerimiento de proteínas mucho mayor.
Debido a que el hígado juega un papel crucial en la síntesis de proteínas, la descomposición de proteínas, la desintoxicación y el metabolismo de los aminoácidos.
Un hígado con exceso de trabajo (que suele ser el caso del hipotiroidismo) puede provocar una acumulación de toxinas y aumentar el consumo de aminoácidos necesarios para la desintoxicación.
Si la demanda es muy alta, la escasez será mucho más rápida.
La norma recomienda que un adulto sano consuma al menos 0,8 g de proteínas por kilogramo de peso corporal.
Sin embargo, para los pacientes con Hashimoto (todos los cuales padecen hipotiroidismo), se recomienda al menos 1,5 g de proteínas por kilogramo de peso corporal.
Para una mujer que pese 70 kg, eso supone más de 100 g de proteínas al día.
¿Cuándo fue la última vez que consumiste 100 gramos de proteínas al día?
Yo diría que casi nunca he tenido un consumo tan alto de proteínas.
Razón n.º 2: dificultades digestivas
Si tienes problemas digestivos como yo, lamentablemente hay muchas posibilidades de que no puedas absorber completamente muchos nutrientes.
Esto quiere decir que aunque consumas muchas proteínas (en forma de carne, batidos, huevos o productos lácteos), aún puedes sufrir una deficiencia de aminoácidos.
La doctora Dorothea Leinung, experta en tiroides, escribe:
"Muchas personas con síndrome de Hashimoto, incluso cuando consumen cantidades adecuadas de proteínas, no pueden digerirlas correctamente y su organismo no puede absorber estos nutrientes de manera eficiente".
Esto se debe a que el suministro de proteínas (la llamada proteólisis) no funciona correctamente.
Durante la proteólisis, las proteínas se digieren y el cuerpo absorbe los aminoácidos que contienen.
Si la proteólisis no funciona, no llegan suficientes aminoácidos al organismo.
E incluso si tienes permeabilidad intestinal, variación del gen MTHFR, una falta de ácido estomacal o problemas de hígado, las proteínas que luego consumes diligentemente no se absorben correctamente.
Si estás leyendo estas líneas y padeces los síntomas del hipotiroidismo, te surgirá una pregunta crucial:
¿Sufres o no de una deficiencia de aminoácidos?
¿Por qué muchas veces no funciona la conversión de T4 a T3?
N.º 1. La mayoría de las personas tienen deficiencia de aminoácidos esenciales porque los requerimientos son muy altos y muchas personas tienen una mala digestión.
N.º 2. El hígado, el lugar donde tiene lugar la conversión, está limitado en su función. Más precisamente: el nivel de glutatión es demasiado bajo y debe aumentarse con aminoácidos.
Los aminoácidos y la glándula tiroides
A partir de ese momento lo comprendí: necesito aminoácidos esenciales.
Tengo que conseguir que mi cuerpo vuelva a ser capaz de convertir mi T4 en T3 e, idealmente, que en algún momento sea capaz de producir suficiente T4 por sí mismo (sin medicación).
La única cuestión era qué opción elegir:
- Opción 1: comer más carne y comprobar qué alimentos tienen mayor biodisponibilidad
- Opción 2: tomar los aminoácidos esenciales directamente.
Elegí la opción rápida.
Yo lo llamo el "método aminodirecto".
Al consumir los aminoácidos esenciales en su forma pura, la digestión no se ve sometida a presión.
Fue especialmente beneficioso para mí porque mis intestinos todavía seguían dándome problemas en ese momento.
Además, es mucho más barato que comer carne todos los días.
Pero antes de empezar a buscar un producto de aminoácidos adecuado, tuve que averiguar qué aminoácidos necesitaba.
¿Qué aminoácidos son especialmente importantes si se padece hipotiroidismo?
Primero hay que entender algunos conceptos básicos:
- Las proteínas están formadas por aminoácidos dispuestos en diferentes estructuras. Existen los llamados aminoácidos esenciales y los no esenciales.
- El cuerpo no puede producir aminoácidos esenciales por sí mismo, por lo que hay que aportárselos desde el exterior.
- El cuerpo puede producir aminoácidos no esenciales por sí mismo, pero solo si tienes suficientes aminoácidos esenciales.
Aminoácidos esenciales más importantes para una glándula tiroides hipoactiva
Los siguientes aminoácidos no los pueden producir el cuerpo y son especialmente importantes en el hipotiroidismo:
L-Metionina para la conversión de T4 a T3
Como se ha mencionado antes, las personas con una glándula tiroides hipoactiva a menudo tienen una capacidad de desintoxicación reducida.
La metionina sirve como punto de partida para la síntesis de glutatión en el hígado.
La activación de T4 a T3 en el hígado solo ocurre con suficiente glutatión.
La metionina también es importante para la absorción de zinc y selenio.
Sufrir de una deficiencia de metionina afectará la absorción de zinc y selenio, ambos minerales son muy importantes para la salud de la tiroides.
Esto significa que, incluso si obtienes mucho zinc y selenio, no hay garantía de que tu cuerpo pueda aprovecharlos.
L-Fenilalanina para formar tirosina y, posteriormente, T4
La fenilalanina es la materia prima para producir tirosina, que es un componente básico de las hormonas tiroideas.
Cuando el cuerpo recibe fenilalanina, este produce tirosina, la cual, combinada con yodo, da lugar a la hormona tiroidea T4.
L-lisina para combatir la fatiga
La lisina es clave para el funcionamiento de las células inmunitarias, por lo que una deficiencia hace que las personas sean más susceptibles a los virus. Esta es una de las razones por las cuales las personas con hipotiroidismo se enferman con mayor frecuencia.
Además, el hierro requiere lisina para su absorción. Esto explica, entre otras cosas, la fatiga crónica y el agotamiento en pacientes con hipotiroidismo.
Si eliminas la deficiencia de lisina, el hierro se absorberá mejor y te notarás con más energía.
Los aminoácidos no esenciales más importantes
Una vez que el cuerpo tiene los aminoácidos esenciales, también puede producir los aminoácidos no esenciales por sí solo. Porque estos también son importantes:
Tirosina para la producción de T4
La tirosina es precursora de las hormonas tiroideas, a saber, la tiroxina (T4) y la triyodotironina (T3).
Sin cantidades suficientes de L-tirosina, las hormonas tiroideas no pueden producirse en cantidades adecuadas, lo que lleva a una disminución del rendimiento metabólico y otros problemas de salud.
Para no depender de la ingesta de L-tiroxina (T4) de por vida, es importante asegurarse de que el cuerpo siempre tenga suficiente tirosina.
Glutamina, cisteína y glicina
Estos tres aminoácidos juntos forman el antioxidante glutatión, que es fundamental para el hígado.
Como se ha explicado antes, el glutatión es especialmente importante para la conversión de T4 a T3.
Pero también tiene muchos otros efectos positivos en la salud del hígado.
Los expertos recomiendan estos aminoácidos si tienes una glándula tiroides lenta
La importancia de los aminoácidos esenciales
Si hay suficientes aminoácidos esenciales disponibles, el cuerpo también puede producir los aminoácidos no esenciales por sí mismo.
Por ejemplo, el aminoácido no esencial L-cisteína, que tiene un efecto positivo sobre los anticuerpos tiroideos.
O el aminoácido L-glicina, que es importante para la activación de T3.
Así, el cuerpo obtiene todos los aminoácidos necesarios y, al mismo tiempo, puedes prevenir cualquier inflamación.
El Patrón Maestro de Aminoácidos (MAP)
El tema de los aminoácidos también se aborda en el libro sobre la tiroides que mencioné antes, específicamente en el capítulo dedicado a los suplementos nutricionales útiles.
Sin embargo, no solo se recomienda cualquier aminoácido común que puedes encontrar en cualquier farmacia.
Se recomiendan aminoácidos basados en el llamado Patrón Maestro de Aminoácidos (o Aminoácidos Humanos).
El Patrón Maestro de Aminoácidos fue desarrollado en el Centro Internacional de Investigación Nutricional (INRC) en Florida por el Prof. Dr. Luca Moretti, quien realiza investigaciones.
Esto implica una dosificación y coordinación muy específicas de los 8 aminoácidos esenciales.
Si estos 8 aminoácidos se dosifican y mezclan correctamente, el cuerpo puede absorberlos a través de las membranas mucosas en tan solo 23 minutos.
Con un 99% de biodisponibilidad, de manera que ni el sistema digestivo, ni los riñones o el hígado se ven afectados.
Es, por así decirlo, la forma más limpia de suministrar al cuerpo aminoácidos sin consumir alimentos ricos en proteínas.
Para comparar: si consumes proteínas vegetales o animales, los aminoácidos primero deben ser separados de esta proteína durante la proteólisis (digestión de proteínas).
Sin embargo, como muchas personas con hipotiroidismo no digieren bien las proteínas, , no se garantiza que una dieta alta en proteínas te aporte todos los aminoácidos necesarios.
Si, en cambio, el cuerpo recibe aminoácidos esenciales siguiendo el patrón de Aminoácidos Humanos, entonces puede producir todos los aminoácidos no esenciales a partir de ellos.
Por esta razón, es fundamental que tomes aminoácidos que se basen en el patrón de Aminoácidos Humanos.
Esto significa que no tienes que tomar glutathione, glicina, glutamina o cisteína por separado.
Además, es mucho mejor si el cuerpo produce los aminoácidos no esenciales por sí mismo.
Después de todo, no queremos entregarle todo al cuerpo "en bandeja de plata".
Es importante que los procesos metabólicos del cuerpo se activen por sí solos una vez más.
Desafortunadamente, en el momento en que se publicó el libro (2013), no había preparados de aminoácidos en los países europeos que se asemejaran al patrón de Aminoácidos Humanos.
En aquel entonces, tenías que pedir suplementos extremadamente caros desde Estados Unidos
.
Afortunadamente, esto ha cambiado y ahora hay incluso algunos fabricantes en los Países Bajos que producen y comercializan aminoácidos esenciales siguiendo el patrón de Aminoácidos Humanos.
Y, además, incluso a precios más accesibles.
En lo personal, utilizo un producto llamado Smart Protein blend. Este suplemento, desarrollado en los Países Bajos y fabricado en Alemania, sigue exactamente el Patrón de Aminoácidos Humanos y está pensado especialmente para personas con intolerancias.
Para mí, el Smart Protein blend ha sido la pieza que faltaba en mi rutina, ya que me ha aportado más energía y bienestar general.
En la página del producto también puedes ver que los fabricantes colaboran estrechamente con expertos especializados en temas de enfermedades autoinmunes e intolerancias.
Lo que finalmente me convenció fueron las numerosas reseñas positivas.
Eso me dio confianza y supe que estaba en el lugar correcto.
Entonces, ¿cómo funciona esta proteína inteligente?
Smart Protein está hecha de aminoácidos 100% puros, basados en el Patrón de Aminoácidos Humanos.
Contiene exactamente los aminoácidos esenciales mencionados anteriormente, cruciales para quienes padecen hipotiroidismo.
Además, incluye dos aminoácidos esenciales adicionales, que también tienen numerosos efectos positivos:
- L-Isoleucina: La isoleucina ayuda a la regulación hormonal del organismo. Por ejemplo, el aminoácido estimula la liberación de insulina, que a su vez estimula la absorción de glucosa y aminoácidos del torrente sanguíneo hacia las células musculares. Esto es necesario no solo para la regulación del azúcar en la sangre, sino también para la producción rápida de energía.
- L-Triptófano: El triptófano es un precursor de la hormona de la felicidad, la serotonina, y por lo tanto puede mejorar el estado de ánimo. Un estudio halló que las personas que consumían cantidades mayores de triptófano tenían menor propensión a la irritabilidad, se deprimían menos y presentaban menos ansiedad que los sujetos que consumían cantidades menores de triptófano.
Pero ahora viene la parte realmente crucial que distingue a Smart Protein de otros productos.
Los aminoácidos de Smart Protein se obtienen mediante un proceso de fermentación de garbanzos en un proceso similar a la digestión.
Así, se absorben directamente a través de las mucosas y, por lo tanto, no se puede desencadenar ninguna reacción autoinmune.
Smart Protein no contiene lectinas, lactosa, gluten, azúcar ni otros aditivos.
Esto la convierte en la fuente de proteína ideal para personas con hipotiroidismo.
La ventaja de los aminoácidos cristalinos 100% puros es que tienen una mayor pureza que las fuentes de aminoácidos de los alimentos y otras fuentes, se disuelven fácilmente y son rápidamente absorbidos por el cuerpo.
Esto permite que el cuerpo utilice rápidamente los aminoácidos para construir y reparar tejidos.
Mi evaluación personal: con Smart Protein para mejores valores tiroideos.
Esa misma tarde pedí Smart Protein en la tienda online de Greenleaf.
Hay una oferta única si compras 3 frascos, y como sabía que esto no sería una “cura milagrosa” inmediata, decidí aprovecharla y pedí tres frascos.
Quizás deba mencionar esto nuevamente: aunque algunos clientes mencionan en sus reseñas que sienten una mejora inmediata, esto depende de cada persona y suele ser un proceso gradual.
Le das a tu cuerpo los nutrientes necesarios para eliminar la deficiencia de aminoácidos, permitiendo que vuelva a producir y transformar hormonas con normalidad.
Todo esto lleva tiempo.
Personalmente, me di un plazo de 3 meses.
Mis primeras semanas con Smart Protein.
A los pocos días, recibí el pedido con los 3 frascos.
Hay 90 cápsulas en un frasco.
La dosis diaria recomendada es de 3 cápsulas (preferiblemente por la mañana con una comida).
Así que cada frasco rinde para 30 días. Me daba suficiente para 3 meses.
El empaque es de muy alta calidad y el frasco es oscuro, por lo que todos los ingredientes activos se conservan y no se ven afectados por la luz UV.
Las cápsulas son de tamaño mediano, pero bastante completas.
Por ahora, tomo 3 cápsulas al día. Lo busqué y en realidad es posible tomar hasta seis diarias con esta dosis, quizá lo intente más adelante.
Para estar segura, continuaré tomando mi L-tiroxina, exactamente como lo recetó el médico.
Normalmente tomo Smart Protein después de la primera comida.
Muchos clientes reportan mejoras inmediatas.
Después de probar Smart Protein durante cuatro días, supe a qué se referían.
Inmediatamente noté dos cosas:
- Después de la primera dosis, me sentí con mucha energía. Nunca había experimentado nada similar con ningún otro suplemento nutricional. Realmente notas cómo tu cuerpo agradece los aminoácidos.
Mi habitual bajón de energía por la tarde ha desaparecido por completo.Al mes: mejor digestión.
Tras casi un mes, entendí mejor por qué había desaparecido mi bajón de la tarde; fue debido a una mejora en mi digestión.
Y no es sorprendente, ya que una rápida búsqueda en Google muestra que los aminoácidos pueden mejorar la salud intestinal.
Por cierto: las cápsulas son muy fáciles de digerir.
Incluso después de tomar 3 cápsulas a primera hora de la mañana con el estómago vacío, no siento ninguna pesadez.
Por cierto, mis otros síntomas también mejoraron.
Me siento muy enérgica durante todo el día.
Me siento más fuerte y activa.
Incluso mis compañeros de trabajo lo han notado.
Antes, las tardes en la oficina eran un puro horror porque no tenía energía en absoluto.
Entonces, lo único que quería era irme a casa cuanto antes y caer en el sofá.
Pero ahora incluso me planteo volver a Pilates y retomar el ejercicio.
Después de dos meses: mejoría de mis valores de tiroides
Los primeros 2 frascos de Smart Protein ya están vacíos. Y de inmediato hice un nuevo pedido.
Desde que empecé a usar Smart Protein, mi vida ha dado un giro de 180 grados.
Nada de fatiga, nada de agotamiento.
Gracias a este extra de energía, incluso pude comenzar a hacer ejercicio nuevamente.
También he perdido unos 3 kilos sin cambiar mi dieta.
Mis niveles de tiroides también han mejorado ligeramente, lo cual, sinceramente, no esperaba.
Después de todo, Smart Protein no es un medicamento para el hipotiroidismo.
Con la supervisión de mi médico, he empezado a reducir ligeramente mi dosis de L-tiroxina.
A lo largo de varios meses logré reducirla de 125 microgramos a 25 microgramos.
He ido controlando mis niveles de tiroides regularmente y escuchando a mi cuerpo en todo momento.
A pesar de haber reducido la dosis, no he dejado de sentirme bien.
Mi TSH ahora está en 1.
Mi fT4 (T4 libre) está en el rango verde a pesar de la dosis mínima de L-tiroxina. ¡Y por primera vez, el valor de T3 también es correcto!
Por curiosidad, también comprobé mis valores hepáticos.
Se dice que el aminoácido L-treonina tiene un efecto positivo sobre el equilibrio de grasas y la función hepática. He podido reducir significativamente el uso de otros medicamentos.
Y sí: durante mi último análisis, mis valores hepáticos también habían mejorado un poco.
Tengo mucha curiosidad por ver cómo estarán en un año.
En resumen: mi entusiasmo por la vida ha vuelto.
Para mí, se podría decir que los últimos meses han cambiado mi vida.
Estoy contenta de haber descubierto Smart Protein y lo recomendaría encarecidamente a cualquier persona con una tiroides hipoactiva.
Te he dejado el enlace a la tienda en línea de Greenleaf Blends, donde obtienes un descuento de 100 euros al comprar 3 frascos.
La empresa detrás de Smart Protein
Detrás de Smart Protein hay una joven empresa de Róterdam llamada Greenleaf Blends.
Greenleaf Blends produce suplementos nutricionales específicamente diseñados para personas con intolerancias y problemas de salud.
También trabajan estrechamente con expertos que se especializan en los temas de enfermedades autoinmunes e intolerancias.
Haz clic en el botón ahora y comprueba la disponibilidad de Smart Protein.
Sobre la editora
Tanja Fellenberg tiene 45 años y ha estado sufriendo de hipotiroidismo, o una glándula tiroides hipoactiva, durante años. Cuando se topó con un libro sobre la tiroides hace un tiempo, las piezas empezaron a encajar. Ha profundizado en el tema durante varios meses y está feliz de haber encontrado la solución perfecta para ella. Ahora ha logrado reducir al mínimo las molestias y se siente tan vital y en forma como cuando tenía veinte años. ¡Espera que sus descubrimientos de los últimos meses aporten por fin claridad a este tema y puedan ayudar a otras personas con hipotiroidismo!
Anexo al artículo
Desde que publiqué este artículo, he recibido preguntas de muchos de vosotros. Por eso, me gustaría responder brevemente a las más importantes:
Debería seguir tomando mi medicación para la tiroides junto con Smart Protein?
¡Sí, sin duda! Por favor, no dejes de tomar tu medicación. Smart Protein no es un fármaco para el hipotiroidismo. Los aminoácidos que contiene simplemente apoyan al cuerpo en la producción de T4 y su conversión en T3. Puedes usar Smart Protein junto con tu medicación. Si te sientes mejor, ve reduciendo gradualmente tu medicación para la tiroides con la ayuda de tu médico. Lo mejor es hacerlo mientras controlas regularmente los niveles de tiroides.
¿Cuál es la mejor manera de tomar Smart Protein?
La dosis recomendada es de 3 a 6 cápsulas por día. Comienza con 3 al día por la mañana y añade 3 más después de la cena si es necesario.
¿Puedo usar Smart Protein aparte de mi medicación?
Sí. Smart Protein consiste en aminoácidos completamente naturales. Por ejemplo, si comieras una cantidad muy grande de carne, tu cuerpo también absorbería una gran cantidad de aminoácidos. Sin embargo, prioriza tus medicamentos al tomarlos. Esto significa, por ejemplo, que si necesitas tomar tus medicamentos con el estómago vacío, debes planificar la ingesta de Smart Protein de manera que no haya conflicto con otros fármacos. El momento en que tomes Smart Protein no suele ser tan importante.
¿Puedo usar Smart Protein incluso si no tengo tiroides?
Sí, incluso entonces sentirás efectos positivos. Los aminoácidos son los bloques de construcción del cuerpo y te proporcionan energía, incluso si ya no tienes glándula tiroides.
¿Qué ingredientes contiene Smart Protein?
Smart Protein contiene los siguientes aminoácidos en una dosis de 3 cápsulas: L-Leucina 205 mg, L-Valina 141 mg, L-Isoleucina 115 mg, L-Lisina 185 mg, L-Fenilalanina 72 mg, L-Treonina 141 mg, L-Metionina 35 mg, L-Triptófano 37 mg, L-Histidina 37 mg.
¿Qué hace que Smart Protein sea diferente de otros suplementos de aminoácidos?
Smart Protein se basa en el Patrón de Aminoácidos Humanos, investigado en la Universidad de Florida. Destaca por su pureza y un 99% de biodisponibilidad. Además, se produce en Alemania bajo los más altos estándares de calidad.
¿Puedo usar Smart Protein si tengo intolerancia a la histamina?
Si tienes intolerancia a la histamina, es mejor consultar con un profesional de la salud o un alergólogo antes de tomar este suplemento para determinar si es seguro para tu condición.
¿Los niños pueden tomar Smart Protein?
Sí, los niños también pueden tomar Smart Protein.
¿Puede tomarse Smart Protein durante el embarazo o la lactancia?
Se recomienda el uso de Smart Protein durante el embarazo y la lactancia y se puede hacer sin preocupaciones.
¿Hay garantía?
¡Sí! Greenleaf Blends tiene una garantía de satisfacción del 100%. Su página de producto indica: "no satisfecho = devolución del dinero". Así que, si no estás satisfecho con el resultado, te devolverán el dinero en su totalidad.
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